Rehabilitación del Palacio Cortiguera

 

Promotor: Dirección general de arquitectura, vivienda y suelo, Administración General del Estado

Fecha: Julio 2018

Lugar: Santander, Cantabria

Arquitectas: Cristina Peces Moral, Eva Niño Mendizábal

Aparejadora: Elia San Román Vázquez

EL EDIFICIO. CUESTIONES PRELIMINARES

Desde el comienzo del proceso proyectual, comprendimos que el edificio aunque reducido en dimensiones, encerraba una gran complejidad., sobre todo en relación con el programa que se proponía y la adaptación del conjunto a la normativa vigente de confort, accesibilidad e incendios.

Su situación en una parcela con un gran desnivel  y forma prácticamente triangular en planta,  crea tres ámbitos exteriores:

  • El jardín situado a norte comunicado con la pasarela con el primer piso, junto con el paso de carruajes
  • El jardín situado a sur frente a la galería de mayor tamaño entre el palacio y el edificio de la policía
  • Un paso angosto, casi una garganta,  entre el edificio y el muro de mampostería que en su parte más estrecha  es de 2,80 m.

El ámbito de actuación propuesto para la ampliación abarcaba la primera y la tercera situación aquí mencionadas. Esto plantea el primer problema, casi todo el espacio se sitúa junto a la calle principal y la fachada del edificio, aunque en las bases de este concurso se menciona que: “La ampliación será difícilmente visible desde la vía pública y el edificio conservará su imagen urbana característica”. Cualquier ampliación que se elevara en altura debería quedar entonces situada en una parte demasiado angosta de la parcela.

El acceso conserva gran parte de sus valores originales tanto espaciales como ornamentales, en su vestíbulo y en la gran escalera que sube a los pisos superiores. Sin duda funciona como acceso a una vivienda, pero no como acceso a un Museo de la ciudad o a un centro de coworking. La demanda espacial y de instalaciones de un vestíbulo de estas características se apropiaría de la totalidad de la planta, así pues surge la necesidad de realizar un  acceso diferente, relegando este acceso para ocasiones especiales.

En su interior, al margen de los problemas de lesiones patológicas que se estudian más adelante en esta memoria, el edificio tiene una distribución muy sencilla. La configuración original del edificio era probablemente en planta baja y planta primera la de una escalera y vestíbulo centrales y alrededor salas de grandes dimensiones. Esta configuración se encuentra actualmente alterada con tabiquerías que encierran cuartos angostos generando esquinas imposibles. Uno de los principales objetivos del proyecto es desde el comienzo propiciar que el palacio recupere la calidad de sus espacios interiores. En esta recuperación, algunos espacios apenas habían sufrido desperfectos, como los salones de la planta segunda. Otras zonas, como la esquina achaflanada se encuentra  desvirtuada por completo, habiéndose perdido todo recuerdo de su configuración original. La escalera de servicio que sube a la planta tercera irrumpe con brutalidad, pasando incluso por delante de una ventana  en su tortuosa ascensión. Así pues surge el problema de un acceso digno a la tercera planta.

LA INTERVENCIÓN

RELACIÓN VOLUMÉTRICA CON EL EDIFICIO EXISTENTE

EL BASAMENTO

Por las razones anteriormente citadas nos decidimos por un edificio que completase al edificio histórico, no que compitiese con él.  El edificio posee unas proporciones llamativamente verticales , pero sin embargo se apoya en un terreno desigual y en pendiente, por esta razón parece que la inclusión de un elemento horizontal  crea una simbiosis perfecta. Por un lado el edificio se apoya sobre una base y surge de ella altivo y sugerente, por otro la situación de una cubierta continua en planta primera crea una nueva situación elevada . Esta situación es explicada perfectamente por el arquitecto  Jorn Utzon: “ Al introducir el uso de la plataforma con su nivel superior ubicado a la misma altua que las copas de los árboles, los mayas descubrieron sorpresivamente una nueva dimensión de la vida, consonante con su devoción a los dioses”. En nuestro caso esta plataforma permite acortar la dimensión vertical del espacio posterior, creando un espacio de proporciones menos verticales y a su vez permite al visitante apreciar desde un nivel más cercano las interesantes decoraciones, balcones, ventanas y molduras de los pisos superiores.

Este basamento se articula y se mueve con el palacio estrechándose o ensanchándose siguiendo la geometría del mismo.

EL ACCESO

Como explicábamos anteriormente, es necesario ubicar el acceso fuera del edificio para poder albergar de forma funcional y accesible todas sus funciones. En este punto el acceso más natural, accesible , bello y emblemático  al edificio se realiza por el antiguo paso de carruajes.  Este acceso nos lleva directamente al edificio de la ampliación en su zona más espaciosa, situándose  a nivel con la planta baja del edificio antiguo.

El juego de volúmenes original creado por el arco, la pasarela y el edificio se completa con un quiebro en la alineación bajo la losa del jardín. Este gesto genera una plazoleta de acogida de los visitantes que dialoga en este juego espacial con la salida del museo que se situará en la puerta .

EL ASCENSOR

Este apartado se explica de esta forma directa ya que su colocación supone una decisión de proyecto a partir de la cual se genera todo lo demás. Según nuestro criterio parece adecuado que se situase cerca del vestíbulo de acceso, cerca del vestíbulo del palacio y que a su vez produjera los menores daños posibles a su ornamentación y estructura.  Así surgieron varias posibilidades:

  • Dentro del edificio: ventajas: no tocaba la fachada. Inconvenientes: ruptura de forjados históricos, colmatación del espacio de ¼ de la planta, difícil diálogo con la geometría existente dadas las dimensiones de un ascensor accesible.
  • Adosado al edificio: Produce un acceso fácil, pero daña la imagen unitaria del volumen del edificio.
  • Separado en un volumen independiente y conectado por pasarelas: Es la solución que se ha adoptado, ya que de esta manera no se interviene en la estructura portante del palacio que queda liberado de un volumen demasiado grande para las dimensiones de sus salas. La fachada apenas se ve afectada, ya que la entrada se realiza por los huecos ya existentes modificando tan solo el peto inferior. El ascensor se erige como un tercer mirador, una nueva torre de luz envuelta en celosías del siglo XXI que dialoga con las otras torres mirador del s.XIX situadas en las fachadas sur y este y que a su vez conecta de forma accesible todos los niveles del edificio.

LA CONEXIÓN  EDIFICIO-AMPLIACIÓN. ENGRANAJE DE GEOMETRÍAS

La conexión debe realizarse por un lugar cercano al vestíbulo de acceso, al ascensor y al vestíbulo del edificio.  El edificio pide con su propia geometría en planta de rectángulo achaflanado conectarse en este punto con la ampliación. Parece que ese gesto siempre estuvo allí. Se sitúa esta conexión en el corazón de la ampliación, a medio camino entre el vestíbulo de acceso,  la zona de exposiciones temporales y el vestíbulo del edificio. Este rincón, el más deteriorado del edificio actualmente, se transforma en uno de los más hermosos, enlazando el nuevo núcleo de comunicación de escaleras y ascensores con el vestíbulo del palacio, como si se tratara de un engranaje delicadísimo en el que lo horizontal y lo vertical se funden para generar un único espacio multidireccional en doble altura.

RECORRIDOS Y USOS

Este engranaje de conexión entre la ampliación y el edificio antiguo divide los recorridos de los visitantes.  Las bases de este concurso plantean la existencia de dos programas independientes que cohabitan en el edificio: el del Museo de la ciudad y el de los espacios de coworking de la fundación Santander creativa. Así pues la diferenciación de ambos recorridos en un punto cercano al acceso parecía acertada.

El museo:  Desde el acceso se llega al punto de conexión con el palacio. Este pequeño vestíbulo secundario lleva al visitante a elegir si acceder a la sala de exposiciones temporales ubicada junto a la entrada de los refugios o a las salas de la colección permanente ubicadas en el palacio. El diálogo entre estos dos espacios se establece en dos puntos: el vestíbulo de conexión con el edificio antiguo y el jardín situado al sur que se establece como un nuevo ámbito expositivo al aire libre generando una circulación dinámica, fluida y libre entre ambos espacios.  La sala de exposiciones se comunica directamente con la sala de conferencias y eventos situada en el nivel -1. En las salas de la colección permanente el techo, formado por listones de madera, contrae y dilata el espacio en altura mediante ondulaciones que permiten modificar la percepción espacial de las distintas zonas expositivas según se requiera en cada momento. A su vez la colocación de este falso techo permite disponer de forma accesible de todas las conexiones eléctricas, luminotécnicas y audiovisuales necesarias.

El nivel -1  acoge la sala de conferencias y un espacio multifuncional que hace las veces de vestíbulo previo y zona para caterings, además de una zona de aseos y los cuartos de instalaciones. El acceso se realiza de forma directa mediante una nueva escalera situada en el espacio del chaflán que lo relaciona visualmente con la planta baja y con el palacio. A su vez  la sala de conferencias se comunica con el jardín a través de una escalinata situada en la esquina sureste del solar y con la sala de exposiciones temporales, formando parte de este continuo espacial y pudiendo  por tanto ser utilizada para múltiples eventos. Los cuartos húmedos se sacan del edificio, para evitar de esta manera el aporte de aguas al interior de un edificio con estructura de madera, de cara a su durabilidad y buen mantenimiento alejado de fugas.

El área de coworking para empresas culturales y creativas se sitúa en las plantas primera, segunda y tercera. En la planta primera se sitúa una sala de reuniones, un aula de formación y un área de coworking para empresas culturales y creativas. Se crea una planta diáfana dividida por cerramientos de vidrio para aislar acústicamente el aula de formación y la sala de reuniones.  En esta planta también el falso techo juega con el espacio en la ausencia de molduras. Este techo diferencia las distintas zonas de trabajo generando una cúpula acústica de madera que aísla del ruido cada puesto de trabajo. Luminarias y climatización se ocultan tras esta geometría. El segundo piso es un espacio abierto que respeta los espacios y decoraciones existentes, para albergar espacios polivalentes de formación.  En este caso se provee la electricidad y climatización desde unas canaletas perimetrales de suelo técnico que discurren por todas las salas, ya que los techos existentes poseen un elevado valor ornamental. En este piso de nuevo el espacio de engranaje situado en el chaflán alberga esta vez una escalera que lleva al tercer piso. Este piso es un espacio diáfano entorno al baldaquino central.

LOS MATERIALES

La ampliación se constituye como un diálogo contínuo del exterior con el interior. La fachada permeable, móvil, plegable está materializada mediante una celosía de varillas metálicas que se disponen como si de cañas se tratara, haciendo honor a la ubicación del palacio en el histórico barrio de “Cañadío” así llamado por encontrarse levantado sobre una antigua zona de cañas o cañadillo.  Este cerramiento acompaña las sinuosas curvas se los entrantes y salientes del edificio, haciendo de éste una parte más del jardín en el que el dentro y el fuera se convierte en una separación ambigua y cambiante, invitando al jardín a convertirse en espacio expositivo.

En el interior esta geometría ondulante se lleva a los techos no ornamentados, acotando el espacio de forma vertical mediante un falso techo móvil alistonado de madera que configura visual y acústicamente los espacios y oculta las instalaciones.

Todos los elementos de nueva construcción que “tocan” en algún punto el palacio son ligeros  y a penas sí rozan el edificio. Las nuevas escaleras son de chapa de acero plegada y las pasarelas del acceso del ascensor son de trámex  y chapa sobre perfiles metálicos que no se apoyan en el edificio sino que constituyen una estructura independiente.

Los pavimentos han de ser pisables un gran número de personas al día, y por tanto deben aguantar este trasiego y a su vez ser fácilmente limpiables. El pavimento tiene la misión fundamental de aportar continuidad entre los espacios. Por ello se realiza un pavimento de hormigón pulido para el interior de la ampliación y un pavimento de losetas de caliza pulidas de grandes dimensiones salvando las zonas cuyo pavimento presenta un gran valor ornamental, como el del vestíbulo del antiguo acceso de la planta baja en el cual se conserva el solado existente de baldosa hidráulica.